Y la escuelita sube otra vez…

Desde que Daniel entró a la escuela grande en 2015 hemos tenido dos aumentos en la anualidad y esta semana mandaron una nota convocando a reunión para la consulta de un nuevo aumento para 2019-2020.

Para los dos aumentos anteriores se convocaron reuniones de padres de familia, supuestamente según la normativa del Ministerio de Educación, la cual está expuesta en el Decreto Ejecutivo N° 601 del 9 de julio de 2015. Este decreto reglamenta el artículo de la Ley Orgánica de Educación, donde indica que las escuelas particulares deberán coordinar los cambios en los costos de la matrícula, uniformes y útiles con el Meduca y su asociación de padres de familia. Ahora, tomemos en cuenta que esta ley data de 1946, es decir, tomó 69 años en reglamentarse…

Según este decreto de 2015, las escuelas tienen un mínimo de seis meses antes del siguiente periodo de matrícula para convocar por escrito a los padres de familia y presentar su propuesta, la cual deberán sustentar oralmente.

Mi primera experiencia en estas reuniones fue decepcionante, pero no fue una sorpresa ya que la escuela se limitó a presentar los cambios, mas no a sustentarlos como indica la normativa (ojo, que no es lo mismo ni se come igual). Por supuesto que no me quedé callada y la representante del Meduca me miró con cara de “oh, b*tch, you didn’t”.

Ya para la reunión del año siguiente fueron un poco más meticulosos, lo cual también se los hice saber… Igual, uno siempre debe andar ojo al Cristo y prestarle atención a los detalles… por ejemplo, ese renglón de donaciones, el cual era equivalente a 30% del déficit, y con el riesgo de sonar a una total grinch digo: like WHY?

Como uno nunca debe quedarse solo con lo que le dicen, comparto algunos detalles a los que prestarle atención durante este tipo de sustentaciones:

  • Presupuesto: ¿Cuánto es? ¿Cuáles son los principales rubros? ¿Cuánto es el ingreso proyectado de la escuela?
  • Variaciones: ¿Cuánto % de un año a otro en total y por rubro?
  • Salud financiera: ¿Cuánto es la diferencia entre ingresos y egresos? ¿Tenemos números rojos? ¿Qué esfuerzos se están haciendo para procurar eficiencias en el gasto? ¿Qué controles se están ejerciendo para mantener los costos variables a raya?
  • Uso del dinero: ¿Cuánto del aumento propuesto iría de incremento de salario a los maestros y mantenimiento de infraestructura? ¿Hay proyectos de inversión contemplados?
  • Entorno macroeconómico: ¿Consideran factores como inflación, aumentos de salario mínimo o ajustes en la escala salarial del Meduca?

Anyways, si no hay objeciones durante la reunión, se entiende que se aprueban los cambios. Si las hubiese, los acudientes tienen 10 días hábiles para presentarlas formalmente por escrito y luego de eso la escuela tiene 10 días hábiles más para revisar las observaciones recibidas y convocar a una nueva reunión.

Al final del día, vivimos en una economía de mercado y la institución es libre de cobrar lo que crea conveniente por sus servicios, así como lo somos nosotros de llevar a nuestros hijos a una escuela que cumpla con nuestras expectativas dentro de lo que podamos pagar. Como consumidores de cualquier producto, esperamos que haya una relación costo-beneficio que justifique lo que se paga y si existe una normativa para este proceso, como es el caso de la educación particular, vamos a cumplirla.

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