A lo largo de estos cuatro años haciendo 5Palos, una de las lecciones más importantes para mi ha sido el sincerarme de verdad en cuanto a mi relación con el dinero. Siempre me he considerado una persona frugal, es decir, compro lo que necesito y raras veces gasto de más en frivolidades, mas no soy truñuña (término de mi madre).
Una de las premisas que tanto Rayza como yo practicamos es vivir dentro de nuestros ingresos. Ahora, esto de vivir dentro de tus ingresos resulta muy fácil cuando ganas un sueldo relativamente bueno, tus gastos son pocos y de ñapa tienes ingresos extras. Piece of cake, right?
La verdad, depende de tu disciplina. Hay gente que mientras más plata ociosa tenga, es más probable que se meta en compromisos que no necesita. Así mismo, pienso que hacer el esfuerzo consciente de vivir dentro de tus posibilidades te entrena para tiempos de vacas flacas… ambos extremos los he vivido y eso me ha hecho una persona más resiliente.
A lo largo de esta aventura de 5Palos, muchos de ustedes nos han compartido sus preocupaciones y sus victorias y queremos que sepan que nos honra un mundo la confianza que depositan en nosotras… Muchos de los tips que damos provienen de nuestra propias vivencias… Creo que entre las dos hemos acumulado una cantidad y variedad de experiencias que nos permiten con todo el conocimiento de causa decir “por aquí no” y prevenir que cometan los errores que nosotras cometimos, o compartirles esas cosas que probamos y nos funcionan… tampoco es como que descubrimos que el agua moja, pero sí creemos fielmente que compartiendo todo es mejor.
Ahora bien, todo lo que ha pasado en el último año nos ha hecho reevaluar nuestra relación con el dinero y poner en tela de duda todo lo que habíamos aprendido antes… Así mismo, nos ha retado para poder llevarles a ustedes información útil, coherente y a tono con sus necesidades y con el contexto tan complejo que estamos viviendo. Pero el escribir para ustedes, nos mantiene honestas y nos obliga a hacernos la pregunta “¿qué haría la Susana de 5Palos?”.
Bueno, aquí algunas cosas que ya no hago:
- Pagar el mínimo de mi tarjeta. Porque pago más.
- Dejar pasar una semana sin actualizar mi registro de gastos. El seguimiento y disciplina son clave para un bolsillo sano a largo plazo.
- Gastar de más en servicios. Mis necesidades están cubiertas y si llegasen a crecer, ahí evaluamos.
- Poner todos los huevos en la misma canasta. Mis ingresos están diversificados y quedarme sin trabajo no significa quedarme en el aire.
- Hacer compras por impulsos. Mis gustos son presupuestados y planificados, además el sentimiento de logro de obtener algo por lo que trabajaste no se compara a la llamarada de capullo de comprar algo en el momento porque sí.
Recuerda siempre: cuentas claras, amistades largas.
Cinco Palos 