A veces nos pasa que por distintos motivos vamos posponiendo las vacaciones… que si hay mucho trabajo en la oficina, que estoy ahorrando para irme en un viaje cool o que quieres coordinar tus vacaciones con el pay o con el crío (como me pasa a mi), y cuando acordamos, se fue el año y no agarramos nada de tiempo libre.
Más allá de lo nice que es no tener que enfrentarse al tranque todas las mañanas, las vacaciones son un derecho de todo trabajador (ver Capítulo IV del Código de Trabajo) y son necesarias para mantener tu salud física y mental, así como tu productividad en el trabajo. Además, el no tomarlas genera un pasivo financiero a la empresa… En una empresa donde trabajé, el pasivo de vacaciones estuvo tan alto, que recursos humanos se inventó un incentivo, en el cual te pagaban el equivalente a dos semanas de salario, pero para cobrarlo tenías que haber limpiado tus vacaciones del año, y no importa en cuántos bloques las dividieras, uno de esos debía ser de dos semanas consecutivas, para que regresaras con las pilas full recargadas.
Generalmente la parte administrativa de tomar vacaciones me ha sido fácil. Solo lleno un formulario, y mi jefe lo firma y tengo mis vacaciones aprobadas sin drama. Lastimosamente, la realidad es que no para todo el mundo funciona de esa manera, así que compartimos algunos tips para que programes tu tiempo fuera sin remordimientos y sin obstáculos:
- Planifica tus vacaciones desde principio de año. Hay empresas que por temas de planilla piden a los distintos departamentos presentar su propuesta tentativa de programación de vacaciones, pero si no lo hacen, proponlo ya sea a tu jefe directo, a tu equipo o a recursos humanos.
- Coordina con tus compañeros de equipo para que no haya más de dos personas fuera a la vez.
- Verifica siempre con recursos humanos los días que has tomado y cuántos tienes en fondo.
- Cuando vayas a efectivamente pedir tus vacaciones, envíale a tu jefa el plan de vacaciones acordado desde inicio de año adjunto con lo que te tenga que firmar para aprobártelas (ya sabes, que no se haga la sueca).
- Un par de días antes de irte, deja una lista de los temas que tengas cerrados o a quiénes estás delegando los que tengas aun en proceso.
- #vacationselfie
Si tienes uno de esos jefes impertinentes que a todo le pone pero, usa términos como “acogerte a tu derecho de vacaciones” y pica por delante informando cómo queda tu saldo de vacaciones, evidenciando que estás tomando tus días dentro de aquello a lo que tienes derecho, no que te los estás inventando (he sabido de gente a quienes sus jefes les dicen que “están abusando”). . y prepárate con una respuesta polite tipo “entiendo que tomé vacaciones recientemente, pero esto, no afectará los tiempos de entrega de x o y proyecto” o “dentro del equipo hemos tomado las medidas necesarias para [ataca su preocupación aquí].
Si es por trabajo, siempre habrá cosas que hacer, así que cualquier momento es bueno para desconectarse. Hay que quitarse la idea de que uno es indispensable en un trabajo (porque NADIE lo es). Sí, es posible que hayan cosas acumuladas para cuando regreses, pero la realidad es que ni Ninkasi quiera y mañana te enfermas o deschavetas, tus responsabilidades las redistribuyen entre la gente que queda o contratan a alguien nuevo. La cosa es que el mundo sigue girando con o sin uno.
Como todo en la vida, todo requiere planificación, así que desconéctate y mándanos una pic leyendo 5palos en la playa 😉