Hace unos días recibí uno de esos memes de final de la quincena. Era una imagen del cajero automático que decía “No te han depositado, así que no sueñes con la camiseta del mundial.”En el momento me, me maté de la risa y lo compartí en todos los grupos de Whatsapp que tengo (son como seis). Esa idea me quedó en la mente y bueno me puse a pensaren la gente que tiene problemas con sus finanzas personales. A muchas personas por más que no quieran, el pensar en sus finanzas personales es un tema que causa estrés.
En base a esto estuve haciendo mi investigación sobre el tema del estrés, y la Asociación Americana de Sicología dice que la situación económica es una de las primeras causas del estrés, y que nosotros los millennials somos una de las generaciones más preocupadas por el dinero que las anteriores. Y por experiencia propia lo puedo decir: vivo preocupada por controlar mis ingresos, gastos, y sobre todo mis ahorros. Creo que no está del todo mal preocuparnos por cosas como esta.Y en vez de convertirlo en algo negativo debemos canalizarlo a llevarlo a una especie de empoderamiento económico para así lograr tus metas.
Este cuento viene de la mano con el hecho que en los últimos días he tenido como grandes cargos de conciencia y hasta un poco de ansiedad por mis hábitos de gastos durante los meses de verano. En lo que va del año he viajado ya casi seis veces entre destinos nacionales e internacionales y todo con el slogan de que “me lo merezco”.Sí, en realidad me lo merezco porque trabajo mucho (al igual que todos); pero también debo recordar que tengo metas para el 2018 que alcanzar y todavía considero que mis chanchos virtualesno están aptos para ellos. Viendo que estuve pasando por una crisis existencial sobre el tema (creo que eso viene con la edad), decidí poner mi cerebro a trabajar y dar con un par de ideas para no distraerme de mi meta final y lograr lo que quiero para final del año. Así que aquí va mi lista de ideas a aplicar a partir de este jueves:
- Atrasar tus compras – tenía varias compras en mente, pero las moveré para otra época del año. De esta manera también tendré tiempo de pensar si en realidad necesito esos artículos.
- Limita tus salidas sociales – la vida social de uno o la categoría “entretenimiento” es uno de los “money flush” más grandes que existen. Yo limitaré mi salidas a dos por quincena (ya saben, no me inviten a salir!).
- Utilizar efectivo solamente – Me pondré un presupuesto semanal para gastos, y estos solo deben ser pagados con cash. De esta manera aplicare todo el arte del autocontrol.
- Apuntar todas las transacciones diarias – esto es algo que he hecho toda mi vida, pero en los últimos meses por cosas de time management, he dejado de hacerlo. ¡Es hora de regresar a los viejos hábitos!
- ¡Prémiate! – lo que haré es que si paso seis meses con un manejo adecuado de mis finanzas, me regalaré algo que desee con muchas ansias (como esa cartera nueva que tanto quiero).
Recuerden que si quieren mantenerse fieles a sus metas financieras (en mi caso: una propiedad), vale la pena tener un revisión de los autocontroles existentes, tal cual las ideas que les mostré en este post. Pronto les cuento cómo me va con estas ideas que se me ocurrieron aplicar para tomar riendas de lo que pasa en mi vida financiera personal.