Uno de mis beneficios favoritos de trabajar en el sector eléctrico es el descuento en la factura de luz. Dependiendo de la empresa donde trabajes, el descuento puede ser del 50-75%, pero el que tengas descuento no te exime de ser cuidadoso respecto a tu consumo. De hecho, yo soy una que vive apagando chécheres innecesarios.
Si bien este descuento es una gran ayuda, yo personalmente siento que su impacto ha sido negativo en cuanto a nuestros hábitos de consumo como familia tomando en consideración que el grueso de nuestro consumo proviene de tres habitaciones con A/C toda la noche. (A mí no me miren. Yo duermo nice con un abanico y la ventana abierta).
Este descuento lo tuve de 2009 hasta 2015 que me cambié de trabajo, sin embargo, el volver a pagar tarifa completa no tuvo un impacto significativo en nuestros hábitos… cuando alguien se acostumbra a la buena vida, es duro bajarse de ese carrito.
En un sondeo nada científico que hice, el monto de la factura de luz de aquellos que me contestaron (¡gracias!) oscila entre el 2-7% de su budget. Claro, todo esto es relativo. Ya cuando hablamos de montos absolutos me dan números entre $7-$80 mensuales.
Ahora que estoy de vuelta en la industria, tengo aplicado el descuento a la casa de mi mamá donde el consumo promedio de los últimos seis meses es de 689 KWh. Esto representaría unos $140 si estuviésemos pagando tarifa completa. En contraste, en mi apartamento prácticamente solo tengo la refri, el micro solo se conecta cuando se va a usar y de uso recurrente ciertas luces, la carga del celular y mi tenaza de cabello. Con esto, mi consumo no supera los 40 KWh y la factura lo más que ha llegado en seis meses es $2.78
Dirán que el consumo eléctrico en mi apartamento es bastante bajo por los pocos electrodomésticos que tengo, pero sepan que sí es posible tener tu consumo en jaque. De hecho, donde mi mamá, hemos visto que el consumo ha ido disminuyendo progresivamente. Ya verán cómo:
- Monitorea no solo cuánto pagas, sino cuánto es tu consumo. Tanto Gas Natural Fenosa como ENSA lo muestran en la parte derecha de la factura.
- Reemplaza tus focos por unidades de bajo consumo
- Apaga lo que no necesites
- Desconecta aparatos que no estén en uso. Hornilla, cafetera, microonda, etc. todo eso te hala corriente aunque no estén encendidos.
- Invierte en equipos Inverter a medida que tengas que ir reemplazando lo que tienes
- Utiliza el timer de tu A/C y mantenlo a 23 C. La idea es estar cómodo, no convertirte en eskimo pie.
Al final se trata de no gastar plata innecesariamente en electricidad que realmente no usas, no que pases a alumbrarte con velas (a menos que tengas una cena romanticona con el pay). Gracias a Ausberto Rosas por compartirnos sus super tips, según él, extremos 🙂