Redes Sociales: Le dí logout and delete!

Esta semana les iba a postear sobre una situación por la que estoy pasando en el trabajo, pero al final una serie de eventos desafortunados me llevaron a querer tener un break de las redes sociales, incluyendo Whatsapp, así que mejor les cuento sobre eso mientras está fresquito. Este sería mi segundo intento (fallido) en tomarme un break.

Todo se remonta al final del 2016 (ese año si estuvo en panga, ¿no?). Entre mis resoluciones de fin de año estaba cerrar Instagram por un mes (sí señores, ¡un mes!), esto lo iba a hacer porque quería darme un break (#firstworldproblem) de todo lo que giraba alrededor de la red social que más uso. Mi decisión de dejar IG por un mes iba de la mano con el hecho que buscaba encontrar más tiempo para hacer otras cosas, y yo estaba clara que eso era una de mis mayores distracciones. Pasaron los días, y llegó el 1 de enero de 2017. Pues mientras le deseaba feliz 2017 a mi familia y amigos por whatsapp (si es que cruzaba un texto, porque en Panamá en las fiestas las líneas colapsan), me arrepentía de haber puesto lo de cerrar Instagram entre mis resoluciones de fin de año, pero después de tanto pensarlo, a la 1 a.m. le di logout y borré el app de mi celular. Puedo decir con plena confianza que las primeras horas no le metí mucha mente, pues retomé el viejo confiable Twitter y me enteraba de todo lo que pasaba en el mundo, aunque poco a poco, me sentía “out of the loop” porque no estaba up to date con los memes, ni había visto la última foto que posteó (inserte algún celebrity), ni me sabía los últimos cuentos de la farándula panameña. Poco a poco la desesperación me mataba y al cabo de cuatro días bajé el app, le di login y regresé al Instragram-world.

Pasaron once meses del 2017, y como les dije antes, una serie de eventos desafortunados, me llevaron a pensar que la solución para todo sería desaparecerme de cuanta red social tuviera (hasta el Pinterest borré). No sé si estaba buscando castigarme o si en realidad sí quería un break de todo lo que me rodeaba, pero lo que sí les puedo decir es que hasta pensaba borrar Whatsapp. Luego me puse a pensar que esto iba a ser un enredo, porque mi madre no sabe usar iMessage e iba a tener que comenzar a llamar a la gente (y no me gustan las llamadas telefónicas). Así que en vista de todo esto, Whatsapp se salvó de mi cacería. Para no hacerles el cuento largo, decidí borrar el app de Facebook, Twitter, Pinterest y mi amado Instagram (estaba bien mal porque yo normalmente hablo con el Insta-story). Y bueno adivinen, ese break me duró solo 24 horas (creo que superé mi record).

Entonces esto me llevó a que hoy me pusiera a buscar un par de artículos sobre cómo disminuir el tiempo que uno pasa en redes sociales y aquí dejo unos tips por si se quieren meter en esa película:

• Monitorea el tiempo que pasas en estas apps.
• Cuando salgas, no estés pendiente del celular (FYI: es de mala educación).
• No lo uses como distracciones para procrastinar.
• Y si es posible, borra o desconéctale la data y notificaciones a los apps.

La verdad estar estas últimas 24 horas fuera de toda red social (ignoré whatsapp lo más que pude), me dio una sensación de paz única y fui mucho más productiva en muchos aspectos. Honestamente, no se si lo haré nuevamente en el futuro, tal vez sí, porque no fue del todo malo estar out, y ver otras cosas que son reales y me rodean. Anyways, al final lo que les quiero dar a entender es que quizás debemos hacer un stop en nuestra vida millenial, darnos un break para ver y lograr apreciar otras cosas que nos rodean.